Perdido en Thánatos

Mi alma lucha entre caminos de sombras y luz negra que me conduce directo al infierno eterno y sin ningún remordimiento.

Son preguntas cotidianas, respuestas desconocida por el hombre. Como un vacío que sólo da pistas de que algo no va bien, es cuando se hace imprescindible analizar la vida propia y el entorno, notar cómo sucedieron los cambios desde el comienzo, antes que todo esto no habían necesidades y ahora están por doquier. 

Muchas veces para lograr lo que se quiere, se hacen cosas que no son precisamente motivo de orgullo, le toca a las mejores personas, a los que sobreviven.

La cosa al subir no es sólo escalar, sino el precio a pagar por los pasos difíciles. Luego la sed de triunfo, como consume,te hace adicto, aumentado en cada palpitación, con cada respiro.

Por fin el momento de abrir los ojos y reconocer las cosas como son.. y apostar todo en un pequeño juego personal, usando a todos como fichas predecibles.

Siempre juegas a ganar..aunque muchas veces perderás y lo sabes, y si no lo pierdes estás perdido. Los problemas aumentan como una deuda de karma que te consume.

El juego consiste en subir y subir peldaños usas la estrategia y dejar la copa llena con lo más preciado. La gente a alrededor, parecieran perderse de un solo sorbo, como aquel que no encontró un camino, su camino.

Pero ahora sabes que encontraste tu destino, los latidos aumentan y la locura vuelve, descarrilada y alegre. 

Viene con algo llamado ego, y el yo vuelve a ser cuestionado por las noches con trastoques de alegría, y he ahí la locura que puja y la vences o al menos eso crees.. La cosa es, por cuánto tiempo? 

Una jodida locura, eso es todo!

Por momentos sientes que no puedes más, un frío tremendo arropa toda esperanza, entumece tu piel, tu juicio, cada centímetro, cada sentimiento. 

A ratos vuelves a sentirte como nuevo.

Decides tomar el tren al desierto de arenas blancas, observas la caja de Pandora, abriéndose lentamente ante ti, como late, como se estremece todo desde dentro.. y eres lo que más temías de niño.. 

no duermes en la redada de tus pesadillas..
y escribes cosas muertas, terriblemente bellas.. 
como una paradoja difícil, nueva, tóxica, difícil.. 
entonces, hablas con el destino.. 

Pero... ¿qué te dice?